Soy un alumno (talmid) que acaba de empezar a estudiar hebreo desde cero. Esa escritura hebrea tan rara me parecía una barrera infranqueable… pero tras dos clases, Rubén (ivrit bemadrid, hebreo en madrid) ha logrado que sienta al alcance de la mano eso de hablar hebreo, algo que durante mucho tiempo me había parecido imposible. Aunque Ruben es flexible y organiza grupos cerca de donde están los alumnos, yo tengo el placer de disfrutar de las aulas de la academia Torval. Cada vez que entro en el edificio decimonónico de la Fundación Fernando de Castro, donde está la academia, me empiezo a encontrar bien, es como trasladarme a otra época. Un espacio tan fantástico te cambia el chip y te facilita el cambio mental necesario para convertirte en niño, que es como mejor se aprende un idioma nuevo. Rubén es un profesor muy cercano que desde el primer momento te pone a hablar en hebreo con infinita paciencia ante tus balbuceos estupefactos… incluso te felicita con frecuencia. Aunque mis clases empiezan cuando ya es de noche, después de todo un día de trabajo, las espero con ganas: ¡qué mejor señal! … y ya puedo decir: ani lomed ivrit bemadrid… incluso MÁS INFORMACIÓN
Les aconsejo que si disponen de unas horas se apunten en Ivrit Madrid, merece la pena. Casi sin esfuerzo, poco a poco, en un ambiente relajado y agradable, te vas introduciendo en el conocimiento del hebreo. No necesitas pensar mucho, sólo dejar tu mente en blanco y permitir que hamoré con sus juegos…te vaya metiendo el alfabeto, el vocabulario…y cuando te quieres dar cuenta dices, ¡anda si puedo leer hebreo! De verdad, os lo aconsejo. Espero conoceros.
Aprender hebreo me ha abierto un mundo nuevo a mis estudios. Resultó ser mucho más sencillo de lo que pensaba y me alegro cada día que puedo leer los textos originales en hebreo sin necesidad de transliteraciones. Ahora me siento en contacto con la fuente original. Muchas gracias por el regalo del conocimiento.
Llevo 10 meses estudiando hebreo y ya estoy esperando que empiece el nuevo curso. Es un idioma difícil pero, al mismo tiempo, interesantísimo. Mirando desde la perspectiva de estos 10 meses, he aprendido mucho, principalmente gracias al empeño de nuestro “moré”, su buen hacer y su conocimiento de los problemas que surgen en el camino del aprendizaje de los hispanohablantes. Las clases son amenas, aparte de seguir el método elaborado por la universidad de Jerusalén, hacemos juegos, concursos, leemos pequeños textos adicionales, todo para familiarizarnos con el vocabulario y enriquecerlo. Hay buen ambiente en clase y la pasión por el hebreo nos une. Un pequeño consejo para los que pensáis empezar a estudiarlo: lo más, más, más importante es asistir a clase, aunque se nos olvide hacer los deberes o no podamos estudiar en casa. Donde más se aprende es en clase.
Recomiendo las clases de hebreo moderno, por su metodología, su contenido, el ambiente de las clases, y los formadores, en mi caso de mi moré me gustó su interés por que todos comprendiesemos bien cada lección, y su gusto por la enseñanza se transmitía.
Shalom. Siempre me ha gustado la cultura hebrea, es cosa de familia, para poder completar mis conocimientos necesitaba aprender hebreo y eso lo estoy consiguiendo en Ivrit beMadrid.
Rubén es un gran profesor y una gran persona. Sus clases son siempre amenas y es muy innovador en cuanto a su metodología. Es muy flexible en cuanto a horarios y siempre está lleno de optimismo y energía positiva. Lo recomiendo encarecidamente.
Hay muchas razones para recomendar las clases: el ambiente es muy enriquecedor, las clases son amenas y fluidas, además, aprendes sin darte cuenta porque se basa en un método muy práctico que te ayuda muy bien a asimilar los conocimientos. ¡No hay un minuto para el aburrimiento!
Estoy muy contenta con las clases de hebreo, tienen una manera muy buena de llegar al alumno y despertar así más el interés por el idioma y por toda la cultura que lo envuelve. El ambiente en clase es muy cercano con los profesores y muy cordial. Una de las cosas que más me gustan es que se fomenta asistir a eventos o excursiones sobre temas relacionados con su muy interesante y hermosa cultura. Un saludo y espero vernos pronto.
Llevaba tiempo buscando clases de hebreo en Madrid, y no es nada fácil encontrarlas. Por fin contacté con IvritbeMadrid y me propusieron un horario que se adaptaba bien a mis obligaciones profesionales. Sólo puedo decir que estoy contentísimo con el resultado (tras un primer trimestre de clases). El método de enseñanza es muy inteligente. Va paso a paso y sin casi esfuerzo (aunque recomiendo un mínimo de dedicación y de estudio personal) se aprende de manera sorprendente. Los grupos son reducidos y el profesorado siempre está dispuesto a resolver cualquier duda. En general ha sido una experiencia muy positiva que pienso continuar en los próximos meses. En pocas palabras, recomiendo el curso por ameno, interesante y, por encima de todo, efectivo.